El secreto de unos tostones perfectos.

Receta de tostones dominicanos

Hola a todos,

Muchas veces me pregunte que era lo que hacia a algunos tostones (O fritos de plátano), increíblemente crocantes y de un color amarillo brillante, mientras otros eran duros, quemados, sin un color atractivo, grasosos, etc.

Gracias a la pericia de mi «sous chef» (Yamiris, mi esposa) aprendí una técnica, que ella a su vez aprendió de su madre y que hace que los tostones sean perfectos.

Ingredientes

  1. Platanos verdes.
  2. Aceite.
  3. Sal.

Preparación

Primero, como sabemos, pelamos los plátanos y los cortamos en ruedas. Los freímos en aceite caliente, pero no demasiado. Es importante llevar el tostón a que este firme en el exterior, que al tocarlo con la cuchara se sienta duro, y que al mismo tiempo tenga un color dorado. Al llegar a este punto, se apartan los tostones y se dejan enfriar hasta que estén temperatura ambiente. Es importante también no dejarlos enfriar demasiado, pues se ponen duros y se hace muy difícil aplastarlos.

Una vez estén tibios se aplastan (Preferiblemente con un majador de plátano, pero hasta la base de un vaso puede servir) y se fríen de nuevo en aceite bien caliente. (Pero tampoco demasiado caliente a fin de que no se quemen)

Una vez listos y servidos se agrega un poco de sal por encima.

El truco esta en el proceso de enfriamiento, sin excesos.

Disfruten!

Arturo

También estamos @

Follow ArturoFeliz on Twitter

Follow El Fogoncito on Twitter

elfogoncito.net

 http://facebooklogin.ws/2009/12/facebook-login/

Follow Me on Pinterest

¿Quieres patrocinar al fogoncito?
Donate Button

Cocinar con «amor»…

Hola a todos,

Recuerdo desde pequeño escuchar la frase «cocinar con amor» y siempre lo vi como algo romanticoide y cursi que se refería a esas amas de casa entregadas y enamoradas totalmente de sus maridos a quienes guardaban su «comidita» caliente y bien acotejadita. Como típico macho varón dominicano en formación, en aquel entonces, rechace ese modelo como algo para mujeres y no fue sino hasta hace algunos años que retome el concepto, a fines de consideración.

Cocinar «con amor» es eso mismo que pensé y considere desde pequeño…pero no es solo eso, es mucho, mucho más. Cocinar con amor es cocinar con entusiasmo, es cocinar con interés y con ganas. Es querer hacerlo. Es emplearse con energia y motivación.

Muchas veces no estamos de animo o estamos muy cansados y la comida queda subida (salada) o bajita (desabrida) o sentimos que el sazon no dio la talla o que le falto algo y no hay forma de arreglarlo. Podria decirse que nos «falto amor». Nos faltó energia y dedicación para derramar en ese plato.

Personalmente y quizás para hacer más facil las cosas para mi (todavia el macho varón dominicano está vivo) he decidido llamar a ese sentimiento de otra forma. Siento a menudo el deseo de cocinar algo que deje a quien lo pruebe sin aliento, que piense que nunca ha comido nada tan sabroso, y si es posible, que le haga replantear su vida con respecto a la comida (No exagero) Es asi como me encuentro probando con sabores, ingredientes, hierbas y condimentos que despierten esas pasiones. Le llamo «cocinar con mala fe»…

Ahi tienen, cocinar con «amor» para mi, es cocinar con «mala fe». Y aunque suene paradójico, es la mismísima cosa!

Arturo